EL sábado de Gloria es el día del
silencio y reflexión para los cristianos. Un día para el recogimiento y la
oración, y el único en el que la iglesia guarda silencio y espera celebrar de
una manera más consciente la resurrección del señor.
Al caer el sol muchas parroquias
inician sus vigilias, y el primer rito es la bendición del fuego nuevo, signo
de la luz del resucitado. Al iniciar la celebración, el sacerdote apaga todas
las luces de la iglesia y enciende un fuego nuevo. Alrededor de ese fuego estamos
los feligreses, un día donde se nota una unidad entre nosotros que a lo mejor
el resto del año no tenemos. Con ese fuego se prende el cirio pascual, que
representa a Jesús. Sobre el cirio, el sacerdote marca el año y las letras
griegas ‘’Alfa’’ y ‘’Omega’’, que significan que Jesús es el principio y el fin
del tiempo, y que este año le pertenece. El sacerdote también marca el cirio
con cinco gramos de incienso, que representan las llagas de Jesús.
A continuación, entramos en
procesión al templo y ahí se reparten unas velas y se van encendiendo junto con
las luces de la iglesia. Tras esto se bendice la pila bautismal, ya que el agua
bendita es el símbolo que nos recuerda nuestro bautismo. Es un símbolo que nos
recuerda que con el agua del Bautismo pasamos a formar parte de la familia de
Dios.
Ese día también es muy emotivo,
pues nuestros adolescentes que se están preparando para la confirmación, junto
con sus catequistas, preparan siempre esta celebración. Es muy bonito ver como
participan con todo su empeño y cariño, y lo más bonito es que se puede
apreciar en sus caras un gesto de felicidad.
Para mí y para mis compañeros de
coro también es un día lleno de alegría, que queremos compartir con todos los
feligreses que están en la eucaristía y transmitirles todos nuestros cantos. Yo
siempre me meto con ellos los días que ensayamos y les digo: ‘’chicos, tenemos
que venir vestidos con colores alegres’’, pues Jesús ha resucitado, y ellos
también se meten conmigo. Además, cuando actuamos lo podemos hacer bien o mal,
pero siempre de corazón.
Que el amor y la esperanza estén
siempre en nuestros corazones y feliz Pascua a todos.
María Esther Vidal Paz.
Catequista de Primaria
Coro PArroquial
Muy bien reflejado todo el proceso de esta noche tan hermosa..que por las circunstancias hemos vivido en casa...tú nos las has iluminado! 🥰😘❤
ResponderEliminarBonitas palabras,un besazo y feliz Domingo de Pascua, para ti y tu familia 🥰
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